Sasi Barroso

Soy madre de 3 hijas y a los 38 años, me diagnosticaron 2 hernias de disco.

El sobrepeso, la vida sedentaria y los 3 embarazos pasaban factura y mi estado anímico era lamentable al verme limitada físicamente y vivir siempre con dolor.

Tras varias sesiones de fisioterapia y medicación durante 2 años y teniendo cita con el neurocirujano para operarme, decidí seguir los consejos de mis fisioterapeutas, Félix y Cristina y comencé a nadar y a perder peso. En 4 meses había dejado toda la medicación y no tenía dolores y en un año ya había dejado 20 kg y conseguía nadar 1500 m en 1 hora. Y por supuesto, no me operé.

Como podía, y con el apoyo de la familia, sacaba tiempo y ganas para ir 3, 4 días a nadar, haciendo encaje de bolillos con los horarios del trabajo y la familia.

En 2008 comencé no solo a nadar, sino a entrenar y competir con el equipo Master del CDNW Roquetas de Mar. Y me saqué el título de socorrista y monitora de natación, y entre otras cosas, de vez en cuando me dedico a enseñar natación a niños y adultos.

Poco a poco, me inicié también en las travesías, mi gran pasión, nadar en el mar, y tras varios altibajos por temas laborales, en 2015 mis esfuerzos se comenzaron a centrar en prepararme para largas distancias, después de conocer a Antonio Aroca.

Ese mismo año, mi amiga Ainhoa se enganchaba a la natación con nosotros y la verdad, sentirme acompañada fue un aliciente muy importante para apuntarme a todas las travesías que podía.

La confianza que adquirí por el tesón y empuje de Antonio y Ainhoa, y las ganas de seguir luchando tras una endometriosis de la cual salí airosa, me hicieron creer que nunca es tarde para luchar por cualquier reto y menos aún si estas en un equipo de gente valiente, comprometida y trabajadora.

El verano de 2016, cuando Antonio y sus amigos Carlos, Angel y Javi cruzaron el estrecho, fue uno de los momentos más emocionante que he vivido en este deporte. Nos hicieron vibrar y nadar a su lado. Muy emocionante. Lo mismo que con las crónicas y fotos que mi amiga Ainhoa y su hermana Arancha, cuando en verano hicieron juntas un montón de travesías del norte.

Ese mismo verano, trabajamos muy duro también en la Travesía de Los Puert8s, una travesía solidaria cuya repercusión ha sido increíble. Los amigos de Antonio que cruzaron el estrecho, Gaby, Arancha y Sagrario, nadaron los Puert8s, nos conocimos y así empezó la aventura de “Mojarse por la vida”

Ahora no entreno sola siempre. Muchos días coincido con Ainhoa, Antonio y Gaby, el más nuevo y valiente del grupo. Gaby en unos meses ha pasado de hacer snorkel a hacer travesías de 5 y 10 km. Su forma de progresar, su voluntad y la forma de enfrentar los entrenos, me hace verle como el niño grande del grupo, con una ilusión desbordante.
Este año, la protagonista de las historias de verano llenas de emoción y entusiasmo sobre travesías, seré yo, nadando al lado de las personas que me han contagiado esta pasión de las aguas abiertas, en el espacio natural que más me gusta, Cabo de Gata-Níjar, gracias al esfuerzo de mucha gente, y sobre todo de mi familia y mis amigos. Y lo haremos por otros, nos mojaremos por CRIS, para ayudar a muchas personas a luchar contra el cáncer.